Hoy en nuestro blog se habla de..

....las Licencias:

Si compañeros, pensamos que las licencias que nos enseñó la profesora en la pasada clase, requerían de una entrada particular, ya que consideramos que son muy importantes para proteger el trabajo de los creadores de obras. Lo que se pretende no es restringir, sino ofrecer una serie de derechos a terceras personas bajo algunas condiciones, como bien explica la web de Cretive Commons.

Hay distintas licencias como la de Reconocimiento, en la cual será necesario reconocer la autoría de la obra; la No Comercial, que quiere decir que el uso o explotación de la misma queda limitada a usos no comerciales; también está Sin Obras Derivadas, que quiere decir que el permiso para utilizar la obra no permite su transformación; y por último se encuentra la de Compartir Igual, que consiste en que la explotación autorizada incluye la creación de obras derivadas siempre y cuando conserven la misma licencia al ser divulgadas.

Estas cuatro licencias se completan en seis con unas cuantas condiciones combinadas como son:
Reconocimiento (by), Reconocimiento-No Comercial (by-nc), Reconocimiento-No Comercial, CompartirIgual (by-nc-sa), Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada (by-nc-nd), Reconocimiento-CompartirIgual (by-sa) y Reconocimiento-SinObraDerivada (by-nd).
Todo esto puede sonar a chino, pero tiene su sentido, y es que muchas creaciones, requieren por ejemplo el uso de la última licencia mencionada ( Reconocimiento-SinObraDerivada), que quiere decir que se permite el uso comercial de la obra pero no la generación de obras derivadas. Esta es una de las tantas licencias combinadas de las que hablamos:

Y ahora,tras comentar todo esto, quiero hacer una pequeña reflexión sobre un artículo que he leído en el Blog de Enrique Dans ,y que tengo que decir que me ha llamado bastante la atención, sobre el tema del que hablamos. En este blog se publica, que según CC Monitor, España encabeza la lista de los países con más licencias, es decir, como la nación con más producción de obras sujetas a esta modalidad. Y es que tenemos nada más y nada menos que alrededor de diez millones de licencias.
Me gustaría entonces, que contestárais a la misma pregunta que formula esta persona en el blog mencionado: "¿Qué podría conllevar el hecho de que un país decida difundir una cantidad cada vez mayor de su producción cultural mediante este tipo de licencias?".
Su autor defiende que es una alternativa al copyright tradicional estricto de la industria cultural y también alude a la posibilidad de que España se convierta en exportador de cultura.

Finalizo así, esperando despertar el interés además de por las licencias, por estas preguntas y reflexiones sobre el tema y sobre el blog expuesto.





Fotografía tomada del Blog Ya hablamos